Yo veo que solamente cuando uno se identifica tanto con los planes de Dios, que uno realmente quiere vivir como un instrumento de su amor, entonces Dios le revela sus planes.
Ese es el requisito; tiene que decir “mi querido señor quiero ser un instrumento de tu amor” ahí el le revela más cosas. No es que entra, tiene el libro y ya está todo arreglado: ya lo entendí, ya lo estudié como en la escuela. Usted pasó el examen y ahora domina esa temática y pasa al otro tema.
No, en la vida espiritual, las temáticas espirituales son: todos los derechos reservados al Señor del amor. El discípulo que quiere tener vida espiritual tiene que entrar en este misticismo de la rendición. Totalmente libre de apegos mundanos