Los demonios son todos los poderosos personajes que hay en este mundo que quieren ganar más influencia explotando a los demás, y los fantasmas y espiritus son seres desencarnados cuya frustración es no poder gozar de la materia, porque precisamente no están en la materia. A ambos les encantan tener adoracion, adoradores, e inclusive traman con los adoradores ciertos beneficios.